Cristina, sin receta contra el creciente malhumor social

El '13-S' fue una manifestación explícita de mal humor social. Pero, la imagen de la gente protestando puede acompañarse de algunos números. Un estudio de Isonomía muestra el deterioro el optimismo y el crecimiento del pesimismo respecto a la situación del país y de la economía personal.



CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Tanto el Gobierno como en la oposición siguen muy de cerca la evolución de un dato clave que tendrá una fuerte incidencia en las elecciones del próximo año: el humor social.
Dirigentes del arco opositor y por algunos analistas que no comulgan con el evangelio cristinista sostienen que ha habido un cambio en la percepción de la población sobre determinados temas, pasando de un clima de optimismo a uno de incertidumbre, o directamente de pesimismo.
Cristina Fernández ganó las elecciones presidenciales un año atrás, cuando fue reelegida con el 54% de los votos. Ese era un momento fenomenal para la imagen de la Presidente, que se ubicaba en cifras muy altas.
Pero las cosas comenzaron a cambiar con el correr de los meses. Para algunos observadores un punto de quiebre se encuentra en la tragedia de Once, cuando 51 personas perdieron la vida en el siniestro ferroviario. Una parte de la población relacionó las deficiencias que llevaron al accidente con la corrupción y la presunta connivenciaentre funcionarios y empresarios.
Por otro lado, las restricciones a la compra de dólares y las acechanzas del Gobierno sobre determinados medios de comunicación son percibidas por una porción de la clase media como un avance sobre las libertades.
Por último, las intenciones re-reelecionistas que agita una parte del cristinismo encendieron lasluces de alerta respecto a una maniobra de Cristina Fernández para perpetuarse en el poder.
Estas circunstancias y otras fueron el abono para lo que se conoció como el '13-S', una megamanifestación en las principales ciudades del país, pero con epicentro en la ciudad de Buenos Aires. El objetivo más visible de las críticas, sin ninguna duda, fue el gobierno de Cristina Fernández.
El '13-S' fue una manifestación explícita de mal humor social. Pero, la imagen de la gente protestando y haciendo sonar cacerolas también puede acompañarse de algunos números.
La consultora Isonomía realizó un estudio de opinión pública respecto a la situación de, justamente, el humor social en el país. La investigación, realizada entre el 24/9 y el 1/10 último sobre un universo de 2.168 casos en todo el país, muestra que se ha deteriorado el optimismo y se ha incrementado el pesimismo respecto a la situación del país y de la economía personal.
Mientras en marzo el 36% de los consultados creía que el país estaba mejor que un año atrás, en septiembre ese número se redujo al 17%. Por el contrario, el 21% que consideraba que la situación estaba peor creció enormemente hasta el 59% en el mismo período.
También se achicó el número de los que consideraban que la situación del país se mantendría igual que en el mismo período de 2011: 23% en septiembre, contra el 43% de marzo.
En cuanto a la proyección hacia el futuro, mientras que en marzo el 37% de los encuestados sobre cómo estará el país dentro un año respondía que "mejor", en septiembre sólo el 22% contestó de la misma forma.
La tendencia declinante se mantuvo. En julio el 33% respondió que la situación iba a mejorar, y en agosto sólo hacía el 28%.
Respecto a los que consideran que el país empeorará en los próximos 12 meses, la brecha se amplió fuertemente y de forma sostenida entre marzo y septiembre: 18% y 50%, respectivamente.
Aquí aparecen los indecisos, que también crecieron entre marzo y septiembre, aunque levemente, al pasar del 9 al 10%, con un piso del 7% en agosto, siempre de acuerdo al estudio de Isonomía.
En cuanto a la percepción económica personal y del entorno, los que consideran que mejoró en comparación con un año atrás, en septiembre el 18% respondió que mejor, mientras que el 37% dijo lo contrario. En marzo, ambas opiniones coincidían en un 32%.
En este punto se destaca el crecimiento de los que respondieron que tanto su situación económica como la de su familia se mantendrá de igual forma que un año atrás: 44% versus el 34% de marzo.
Por su parte, si bien no es tan pronunciada como en el anterior ítem, la percepción con miras a futuro también sufrió un desgaste entre marzo y septiembre. De acuerdo al reporte de Isonomía, pasó del 39% al 32% la porción que considera que su situación económica y la de su familia mejorarán dentro de un año. Mientras que los que creen  que empeorarán subieron del 26% al 28%.
Aquí también lideran quienes no creen que su situación económica sufra cambios. Pasó del 27% en marzo hasta el 33% en septiembre.
En cuanto al análisis de lo que Isonomía denomina "comportamiento de las imágenes positivas de los principales dirigentes respecto al humor social", el trabajo muestra que
>respecto a la Presidente de la Nación, su imagen positiva aumenta consistentemente a medida que aumenta el nivel de optimismo: así, su imagen positiva es del 95% entre los muy optimistas y sólo del 10% entre los muy pesimistas.
>respecto a Mauricio Macri y Francisco de Narváez (sobre todo en la Prov. De Buenos Aires) se comporta de manera opuesta, recogiendo más adhesiones en los menos optimistas.
>Por último, tanto Sergio Massa como Daniel Scioli poseen niveles de imagen positiva muy altos que trascienden las diferenciaciones que producen las variaciones del humor social (en mayor medida en el Intendente de Tigre).
Sobre estos últimos referentes, Isonomía agrega: "La variabilidad de la imagen de ambos dirigentes parece ser más “independiente” de las valoraciones que el electorado realiza respecto de su situación personal y de la del país. La asociación entre estas dos variables es relevante porque indica, en gran medida, la amplitud de los públicos electorales a los que podría apuntar cada uno de los candidatos en función de como vaya mutando la percepción del humor social de los argentinos".

Comentarios

Entradas populares