Al sumarse Gendarmería, el conflicto escala hasta Cristina

Al igual que ocurriera en julio pasado con el paro de Camioneros en el transporte de combustibles, Cristina decidió interrumpir su visita a Lima (en aquella oportunidad era en Río de Janeiro) para abocarse a la solución del conflicto con Prefectura que ahora sumó a la Gendarmería. Tras el fracaso de la gestión de Sergio Berni del martes (02/10) la primera mandataria busca una salida a una situación generado por un decreto que también tiene su firma y desató el malestar en las fuerzas de seguridad.



CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- El conflicto que se inició con el acuartelamiento de la Prefectura de La Boca se propagó no sólo a otros distritos sino que también sumó a la Gendarmería que inicialmente observó a la distancia la protesta de los prefectos y tras analizar la situación –luego del fracaso de la intervención del subsecretario de Seguridad Sergio Berni que se acercó al edificio Guardacostas para iniciar negociaciones el martes por la tarde- decidieron plegarse a la protesta y este miércoles (03/10) se movilizaban al edificio Centinela.
Ocurre que los gendarmes aún no sufrieron el recorte de sus haberes porque no cobraron, pero el decreto que reordenó los sueldos también los alcanza a ellos y estarán en la misma situación que sus pares de Prefectura con reducciones de hasta el 70 por ciento.
Con la escalada del conflicto -además ya se detecta malestar en las fuerzas armadas-, Cristina Fernández decidió adelantar su regreso al país desde Lima, Perú, donde tenía agendada una cena con el presidente Ollanta Humala.
Desde anoche a las 23hs, el subsecretario Sergio Berni, Garré, Hernán Lorenzino y el secretario de Hacienda Juan Carlos Pezoa analizaban con Cristina en la residencia de Olivos, una salida al conflicto.
Como explicáramos ayer en Urgente24, la reunión de Berni en el edificio Guardacostas fue un fracaso pero, aparentemente, es lo que esperaba el subsecretario para un escenario que le resulta conveniente pero que es muy peligroso.
Según narra este miércoles (03/10) Mariano Obarrio en la Nación, Cristina le ordenó a “Nilda Garré, dar marcha atrás en la defectuosa liquidación de sueldos de la Prefectura Naval y suspender, anoche, el pago a la Gendarmería, que debía ser hoy, para evitar otro foco de conflicto”.
El problema es que ese decreto no solo lleva la firma de Abal Medina y Garré, sino también de Cristina.
Los prefectos el martes pidieron por Berni, que fracasó. El teniente coronel les resulta más afable a las fuerzas de seguridad que Garré, pero tras el fracaso de las negociaciones hoy gendarmes y prefectos apuntan contra Garré, sigue Abal Medina o la propia Cristina.
La Nación indica que la rebelión de los suboficiales contra sus jefes implicó una ruptura de la cadena de mandos, además de que se reavivaron las internas en el Gobierno.
La protesta de los prefectos es la consecuencia de una política salarial que se inició en 2005 con el otorgamiento de suplementos (por ejemplo una compensación por vivienda) a los efectivos en actividad para evitar pagarle aumentos a los retirados.
Esto provocó una cantidad innumerable de amparos judiciales que derivaron en la sanción de más de 5000 medidas cautelares, en lo que respecta a los prefectos, para poder seguir cobrando el total de su salario.
En tanto, el reclamo de los Prefectos ya excede la cuestión salarial.
El agente de Prefectura Naval Luis Cabañas advirtió este 03/10 que si el Gobierno no accede a satisfacer "al menos los seis puntos más importantes" del petitorio que le presentaron no se van a "mover" del edificio Guardacostas, donde están desde las 14 de ayer para reclamar la restitución de los haberes.
"Hasta que no nos den por lo menos los seis puntos más importantes del petitorio, nosotros, la Prefectura, el personal subalterno, en actividad y retirados, de acá no nos vamos a mover", sostuvo el efectivo, quien lamentó el "abandono de parte del Gobierno" en el aspecto salarial y remarcó que están dispuestos a protestar "a largo plazo".
En declaraciones a la prensa en el edificio Guardacostas, ubicado en la avenida Eduardo Madero 235, barrio porteño de Puerto Madero, Cabañas ratificó que el petitorio presentado ayer al viceministro de Seguridad, Sergio Berni, consta de "nueve puntos", entre los cuales figuran un "tope salarial de 7.000 pesos" y la devolución de los adicionales que les quitaron con el decreto 1307.
Desde Gendarmería, Fernando, cabo primero de la Fuerza, advirtió que la situación "ya no da para más" y ejemplificó que "hay cabos que están cobrando 3.100 pesos".
"Estamos solicitando la presencia de más gendarmes", sostuvo el efectivo, quien se encontraba desde las 5 junto a medio centenar de compañeros en el edificio Centinela, en la Avenida Antártida Argentina 1480, barrio porteño de Retiro.
El cabo manifestó que están "en una situación muy crítica".
"Queremos un sueldo digno y mejoras en las condiciones laborales, dignidad para todo el personal de la fuerza", explicó a Radio 10.
Desde la oposición, el senador radical Nito Artaza, dijo que “los dos proyectos que presenté pudieron haber contribuido a evitar estas situaciones, pero parece que la voluntad del Gobierno no está en mejorar la calidad de vida de todos los sectores del país. En el Congreso se encajonan proyectos de manera sistemática y ahora estamos viendo las consecuencias”.
Vilma Ripol, Proyecto Sur: “El brutal recorte salarial confirma la necesidad de que tengan su sindicato para organizarse y tener sus representantes. La sindicalización no sólo les permitiría defender sus salarios y condiciones laborales, sino que posibilitaría abrir un debate sobre su rol frente a las luchas sociales y al delito”.
Daniel Presti, PRO: “Hoy, nos desayunamos con esta protesta de los trabajadores de Prefectura que sufren una reducción en sus salarios. Esto demuestra, una vez más, que no hay planificación en Seguridad desde la Nación”.

Comentarios

Entradas populares