El disparate de Boudou: Los Kirchner pierden 11 votos en Diputados
Resulta incomprensible la decisión del kirchnerismo, expresada vía el inconsistente Amado Boudou (alguna vez la Ucema tendrá que pagar por el Doctorado que le otorgó), de romper todos los puentes con el interbloque de centroizquierda, 11 votos en Diputados que le habían resultado importantes al Frente para la Victoria.
POR EDGAR MAINHARD | 21/04/2010 | 00:19
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). En la Cámara de Diputados de la Nación, el Frente para la Victoria y sus aliados se encuentran en minoría ante la sumatoria de sus adversarios. Por eso resultó tan importante el esporádico aporte de 11 votos de la alianza de centroizquierda no kirchnerista que, en varias ocasiones, intentó una suerte de 3ra. posición que fue funcional al kirchnerismo.
Elisa Carrió tuvo que denunciar esa situación para conseguir un cambio de actitud en la más reciente sesión en Diputados. Además ocurrió la notable denuncia del diputado nacional Claudio Lozano (Ciudad de Buenos Aires-Proyecto Sur), acerca de posibles irregularidades en el canje de deuda que organizó el ministro de Economía, Amado Boudou.
El ministro Boudou y, se supone, el diputado nacional ausente Néstor Kirchner (Buenos Aires-Frente para la Victoria), decidieron confrontar con ese grupo de centroizquierda (5 votos de Proyecto Sur, 3 de SI por la Unidad Popular, 2 de Libres del Sur y 1 de Diálogo por Buenos Aires), a partir de la confusa situación (y pertenencia) de un economista llamado Roberto Larosa, que colaboraba con Lozano aunque no solamente con él, en oficinas del Ministerio de Economía.
El acontecimiento ha resultado muy oportuno para el arco no kirchnerista.
Por un lado, es un castigo para Proyecto Sur, SI y Libres del Sur, que creían que la 'guerra sucia' de los Kirchner era solamente contra Mauricio Macri o Francisco de Narváez.
Por otra parte, presiona mucho a ese frente de centroizquierda que había restado votos, en varias ocasiones, al resto del no kirchnerismo que pretendía sesionar para aprobar proyectos a los que se oponía el kirchnerismo.
Sin duda que Kirchner/Boudou no han consultado su embestida contra la centroizquierda con, por ejemplo, Agustín Rossi (Santa Fe-Frente para la Victoria, de cuyo bloque en Diputados es el jefe). Él les habría explicado lo estratégico que resultaba ese intento de 3ra. Posición ensayado por Fernando Solanas y los suyos.
Ahora sería el momento -si el no kirchnerismo incursionara en la política- de establecer acuerdos básicos, coincidencias mínimas con Proyecto Sur-SI-Libres del Sur, de manera tal de consolidar esos 11 votos en una estrategia única de ataque frontal al Frente para la Victoria y sus aliados.
Ese es el enfoque político del acontecimiento. Hay otros enfoques. Por ejemplo, Boudou prefirió el estrictamente policial, provocando una confrontación que resulta conveniente en términos de equilibrios legislativos.
Los Kirchner rompieron con Francisco de Narváez cuando intentaron vincularlo a la causa de tráfico ilegal de efedrina. En esa operación perdieron a Federico Faggionato Márquez como juez federal.
Los Kirchner rompieron definitivamente con Mauricio Macri a partir de negarle la transferencia policial y luego castigarlo porque éste organizó su propia fuerza de seguridad.
Los Kirchner rompieron hace mucho tiempo con Elisa Carrió, pese a que fueron aliados de ella y de Aníbal Ibarra contra Macri en los comicios de 2003 por la Jefatura de Gobierno porteño.
Los Kirchner rompieron ahora con el bloque de centroizquierda.
Los Kirchner se especializan en romper y saben bastante poco de construir. Así le ponen un tope a su experiencia gubernamental.
En cuanto al hecho en sí mismo, las dudas son tantas como las denuncias mutuas que se cruzan los protagonistas.
Lozano denunció un “operativo montado” como represalia a su denuncia por el canje de deuda y el funcionario K lo tildó de “mentir” por estar “involucrado en el robo de información”.
“Roberto Larosa es un experto en cuestiones de presupuesto que trabajó en el Ministerio de Economía. Y no es que lo sorprendieron (en el despacho del subsecretario de Presupuesto del Ministerio de Economía, Raúl Rigo) sino que lo fueron a buscar con nombre y apellido. La única razón por la que está detenido es por sus vínculos con nosotros, que hemos denunciado el canje de deuda e identificado a una consultora que participaba del operativo”, dijo Lozano.
Él denunció "un operativo montado por el Ministerio de Economía, por el gobierno nacional para tratar de ensuciarnos".
Y narró que Larosa -quien fue detenido el viernes pasado 16/04 y según la versión oficial fue descubierto debajo de un escritorio con una lupa y 2 linternas- “ingresó legalmente al Ministerio de Economía” como lo hace de costumbre.
“(...) Este viernes le dijeron que lo tenían asentado en una planilla, primer dato para entender que lo estaban esperando. Lo hicieron subir los funcionarios que normalmente lo atienden, estuvo en el 8vo. piso, luego subió al 10mo. y bajó al 4to. piso, que es por donde pasa a buscar la planilla de recaudación", continuó.
En ese momento fue cuando, siempre según el relato del grupo de centroizquierda, a Larosa “se lo fue a buscar y se lo tenía sindicado y marcado desde el mismo momento en que ingresó al Ministerio de Economía". A
Lozano dijo que lo mantienen detenido a pesar de que “no le encontraron nada” y aclaró que "colabora" con él pero "asesora" a otros legisladores.
Muy distinta fue la versión de los hechos que dieron el ministro de Economía, Amado Boudou, y su vice, Roberto Feletti: “El paseo de Larosa (por el Ministerio) es tan patético como la defensa que hace Lozano de él”, contraatacó el titular de la cartera.
“Lozano miente y busca confundir. Larosa fue detenido en la oficina 410 del Ministerio, encerrado con llave, agazapado detrás de un escritorio", ratificó Boudou este martes, en la misma sintonía con la primera versión oficial conocida. “No tenemos duda que Lozano está involucrado en el robo de información”, agregó.
El ministro calificó además de “lamentable” la conferencia de prensa realizada por Lozano, junto a Pino Solanas y otros referentes de la centro izquierda, y lamentó que ese grupo “termina siendo funcional a la derecha” y “sale a mentir”.
Por su parte, el viceministro de Economía, Roberto Feletti, desmintió que Larosa haya trabajado en el Ministerio de Economía, tal como aseguró Lozano y aseguró que sólo era una persona que en ocasiones se acercaba a realizar distintas presentaciones.
POR EDGAR MAINHARD | 21/04/2010 | 00:19
Elisa Carrió tuvo que denunciar esa situación para conseguir un cambio de actitud en la más reciente sesión en Diputados. Además ocurrió la notable denuncia del diputado nacional Claudio Lozano (Ciudad de Buenos Aires-Proyecto Sur), acerca de posibles irregularidades en el canje de deuda que organizó el ministro de Economía, Amado Boudou.
El ministro Boudou y, se supone, el diputado nacional ausente Néstor Kirchner (Buenos Aires-Frente para la Victoria), decidieron confrontar con ese grupo de centroizquierda (5 votos de Proyecto Sur, 3 de SI por la Unidad Popular, 2 de Libres del Sur y 1 de Diálogo por Buenos Aires), a partir de la confusa situación (y pertenencia) de un economista llamado Roberto Larosa, que colaboraba con Lozano aunque no solamente con él, en oficinas del Ministerio de Economía.
El acontecimiento ha resultado muy oportuno para el arco no kirchnerista.
Por un lado, es un castigo para Proyecto Sur, SI y Libres del Sur, que creían que la 'guerra sucia' de los Kirchner era solamente contra Mauricio Macri o Francisco de Narváez.
Por otra parte, presiona mucho a ese frente de centroizquierda que había restado votos, en varias ocasiones, al resto del no kirchnerismo que pretendía sesionar para aprobar proyectos a los que se oponía el kirchnerismo.
Sin duda que Kirchner/Boudou no han consultado su embestida contra la centroizquierda con, por ejemplo, Agustín Rossi (Santa Fe-Frente para la Victoria, de cuyo bloque en Diputados es el jefe). Él les habría explicado lo estratégico que resultaba ese intento de 3ra. Posición ensayado por Fernando Solanas y los suyos.
Ahora sería el momento -si el no kirchnerismo incursionara en la política- de establecer acuerdos básicos, coincidencias mínimas con Proyecto Sur-SI-Libres del Sur, de manera tal de consolidar esos 11 votos en una estrategia única de ataque frontal al Frente para la Victoria y sus aliados.
Ese es el enfoque político del acontecimiento. Hay otros enfoques. Por ejemplo, Boudou prefirió el estrictamente policial, provocando una confrontación que resulta conveniente en términos de equilibrios legislativos.
Los Kirchner rompieron con Francisco de Narváez cuando intentaron vincularlo a la causa de tráfico ilegal de efedrina. En esa operación perdieron a Federico Faggionato Márquez como juez federal.
Los Kirchner rompieron definitivamente con Mauricio Macri a partir de negarle la transferencia policial y luego castigarlo porque éste organizó su propia fuerza de seguridad.
Los Kirchner rompieron hace mucho tiempo con Elisa Carrió, pese a que fueron aliados de ella y de Aníbal Ibarra contra Macri en los comicios de 2003 por la Jefatura de Gobierno porteño.
Los Kirchner rompieron ahora con el bloque de centroizquierda.
Los Kirchner se especializan en romper y saben bastante poco de construir. Así le ponen un tope a su experiencia gubernamental.
En cuanto al hecho en sí mismo, las dudas son tantas como las denuncias mutuas que se cruzan los protagonistas.
Lozano denunció un “operativo montado” como represalia a su denuncia por el canje de deuda y el funcionario K lo tildó de “mentir” por estar “involucrado en el robo de información”.
“Roberto Larosa es un experto en cuestiones de presupuesto que trabajó en el Ministerio de Economía. Y no es que lo sorprendieron (en el despacho del subsecretario de Presupuesto del Ministerio de Economía, Raúl Rigo) sino que lo fueron a buscar con nombre y apellido. La única razón por la que está detenido es por sus vínculos con nosotros, que hemos denunciado el canje de deuda e identificado a una consultora que participaba del operativo”, dijo Lozano.
Él denunció "un operativo montado por el Ministerio de Economía, por el gobierno nacional para tratar de ensuciarnos".
Y narró que Larosa -quien fue detenido el viernes pasado 16/04 y según la versión oficial fue descubierto debajo de un escritorio con una lupa y 2 linternas- “ingresó legalmente al Ministerio de Economía” como lo hace de costumbre.
“(...) Este viernes le dijeron que lo tenían asentado en una planilla, primer dato para entender que lo estaban esperando. Lo hicieron subir los funcionarios que normalmente lo atienden, estuvo en el 8vo. piso, luego subió al 10mo. y bajó al 4to. piso, que es por donde pasa a buscar la planilla de recaudación", continuó.
En ese momento fue cuando, siempre según el relato del grupo de centroizquierda, a Larosa “se lo fue a buscar y se lo tenía sindicado y marcado desde el mismo momento en que ingresó al Ministerio de Economía". A
Lozano dijo que lo mantienen detenido a pesar de que “no le encontraron nada” y aclaró que "colabora" con él pero "asesora" a otros legisladores.
Muy distinta fue la versión de los hechos que dieron el ministro de Economía, Amado Boudou, y su vice, Roberto Feletti: “El paseo de Larosa (por el Ministerio) es tan patético como la defensa que hace Lozano de él”, contraatacó el titular de la cartera.
“Lozano miente y busca confundir. Larosa fue detenido en la oficina 410 del Ministerio, encerrado con llave, agazapado detrás de un escritorio", ratificó Boudou este martes, en la misma sintonía con la primera versión oficial conocida. “No tenemos duda que Lozano está involucrado en el robo de información”, agregó.
El ministro calificó además de “lamentable” la conferencia de prensa realizada por Lozano, junto a Pino Solanas y otros referentes de la centro izquierda, y lamentó que ese grupo “termina siendo funcional a la derecha” y “sale a mentir”.
Por su parte, el viceministro de Economía, Roberto Feletti, desmintió que Larosa haya trabajado en el Ministerio de Economía, tal como aseguró Lozano y aseguró que sólo era una persona que en ocasiones se acercaba a realizar distintas presentaciones.
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