La reducción del IVA a alimentos beneficia más a las familias de mayores ingresos que a las más pobres

La reducción a 0% del IVA a un conjunto de alimentos beneficia más a las familias de altos ingresos que a las más pobres. Las familias pobres reciben sólo un cuarto de la baja de IVA.


Así señala IDESA (Instituto para el Desarrollo Social Argentino) en base a la Encuesta Nacional de Gasto de los Hogares del INDEC. El Informe señala que “a menor nivel de ingresos del hogar, mayor es la proporción asignada a comprar alimentos. Pero como la brecha de ingresos es tan alta, quienes más alimentos consumen terminan siendo las familias de altos ingresos aun cuando asignan una menor porción de su presupuesto a este destino. Por eso, la mayor parte del esfuerzo fiscal de quitar el IVA a los alimentos es apropiado mayormente por familias de altos ingresos. A las familias pobres les llega sólo un cuarto de la reducción del IVA”.

Además “entre las familias pobres es más frecuente la adquisición de alimentos en almacenes que operan “en negro” y que, por lo tanto, no son sensibles al cambio del IVA. En cambio, las familias de altos ingresos son más propensas a comprar en supermercados que son los más presionados por el gobierno a cumplir con la baja de precios asociada a la reducción del impuesto. La misma Encuesta Nacional de Gasto muestra que sólo el 20% de las ventas de los supermercados es a familias pobres, mientras que el 43% es a familias que están en el 30% de los hogares de mayores ingresos”.

De la Encuesta Nacional de Gasto de los Hogares del INDEC surge que:
- El 30% de los hogares de menores ingresos (pobres) asigna 47% de su ingreso a alimentos, pero compra sólo el 26% de todos los alimentos que se venden en el país.
- El 40% de los hogares de ingresos medios asigna 30% de sus ingresos a alimentos y consume el 38% de los alimentos.

- El 30% de hogares de mayores ingresos asigna sólo el 20% de sus ingresos a alimentos, pero consume el 36% del total de los alimentos que se consumen.
Como vienen planteando distintos sectores políticos y sociales, IDESA dice que “un instrumento más eficiente y justo, que además permitiría responder al pedido de los gobernadores, es restablecer la devolución del IVA a las familias pobres cuando pagan con tarjetas de débito. Hasta el año pasado se devolvía parte del IVA a jubilados con haberes mínimos, beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, del plan Progresar y el servicio doméstico.
Con un costo fiscal acotado se podría ampliar el padrón de beneficiarios procurando llegar a todas las familias vulnerables y extender la eximición a todos los alimentos, no solo al acotado listado que dispuso el gobierno. Simplemente apelando a este instrumento, que ya está probado que funciona, se podría lograr mayor impacto social y menor pérdida de recaudación evitando el conflicto con las provincias”.
También este mecanismo “contribuye a fomentar la cultura del pago bancario entre las familias más humildes. Tender a eliminar el pago en efectivo, como ya ocurre en algunos países, es una herramienta muy potente para reducir la informalidad. En la misma línea opera la simplificación de los impuestos. Aplicar el IVA con una multiplicidad de alícuotas facilita la evasión; además de generar otros efectos distorsivos como la posibilidad de que algunos contribuyentes sistemáticamente tengan saldos a favor”.
PDL

Comentarios

Entradas populares