Con los ‘deberes’ que le pidió USA ya hechos, Kicillof pedirá plata al BID y BM

Axel Kicillof cerró la semana pasada con el Club de París el pago de una deuda mayor a la que reconocía el Gobierno en 2008, aún calculando intereses. Sin el FMI en el medio, el plazo logrado para los pagos fue menor, aunque el grueso lo pagará el gobierno que asuma en 2015. Los países integrantes del Club no se comprometieron tampoco a garantizar inversiones. Con todo, la cuestión de fondo que es conseguir crédito internacional y atraer dólares constantes y sonantes no se logrará con las inversiones que provengan de este acuerdo, sino con el Banco Mundial y el BID, donde USA ha venido votando en contra de nuestro país a raíz de la falta de acuerdo con los países del Club, la negativa a pagar los juicios en el CIADI y la manipulación de las estadísticas del Indec. Por eso, Kicillof ya piensa en ir a tocar esas puertas con sus deberes hechos, lejos del ‘relato’ y tal y como pedía Washington.


CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- El acuerdo con el Club de París fue una antesala para los planes del Gobierno. De ese arreglo Axel Kicillof no espera que se concrete el punto referente a las inversiones en nuestro país. De hecho el Club tampoco se comprometió a ello, solo abrió la puerta a quienes lo deseen, algo poco probable que ocurra ahora en el contexto de la economía argentina con cepo cambiario y limitaciones al giro de divisas, por mencionar solo dos cuestiones.
La cuestión de fondo para Cristina es ir a tocar las puertas del Banco Mundial y del BID, además de buscar otras fuentes de financiamiento externas. Pero en las dos primeras opciones la ‘llave’ la tiene Estados Unidos que vino votando en contra de nuestro país pero que ahora operó a favor de la Argentina ante los ‘duros’ Japón y Alemania, para que Kicillof concrete el acuerdo en Francia la semana pasada.
El diario oficialista BAE, muy cercano al ministro de Economía, admite este lunes (2/06) la movida detrás del acuerdo con el Club de París tras la entrevista que Axel Kicillof otorgó en su casa, la semana pasada. Allí aseguró que “el Gobierno mantiene conversaciones con los países que demoran créditos para Argentina en distintos organismos internacionales”.
En el discurso, Kicillof prometió a los periodistas que tras el cierre con el Club “se debería esperar un flujo mayor de inversiones y holgura en el mercado de divisas y que entonces haya mas reservas. Pero como vi algunos movimientos especulativos, no puedo asegurarlo”.
Sobre el BID y el Banco Mundial reconoció: Tenemos conversaciones con todos los países que votan en contra de Argentina en cualquier foro internacional para que cambien la actitud”,contestó cuando se le preguntó si esas naciones, como Estados Unidos, comenzarán a apoyar a Argentina en esos organismos.
El acuerdo con el Club, que si bien viene a cumplir obligaciones internacionales y levanta otro ‘default’, encierra concesiones que claramente apuntaban a ser vistas por otros sectores. Por ejemplo, no hubo quita en el monto adeudado como ocurriera en otras reestructuraciones que llevó adelante el kirchnerismo. No se dejó plasmado el compromiso de los países a las inversiones en la Argentina. Se reconoció un monto mayor de deuda. El plazo de 5 años se puede extender a 7, pero si el FMI hubiera intervenido habría sido de 10 a 12 años, aunque el Gobierno logra que el grueso de los pagos le toque al presidente que asuma en 2015.
Tantas concesiones se explican porque Cristina necesita dólares y recomponer reservas para terminar bien su mandato. Y para eso lo más rápido es conseguir préstamos del Banco Mundial y del BID, donde países como USA votan en contra de prestarle a la argentina hasta tanto resolviera 3 cuestiones esenciales: acuerdo con el Club de París, pago de juicios en el CIADI y normalizar las estadísticas del Indec.
El diario paraoficialista Ámbito Financiero, también se entusiasmó con esa posibilidad. El viernes 30/05 indicó que el Gobierno de los Estados Unidos dejará de votar en contra de los desembolsos de créditos al país en organismos como el BID y el Banco Mundial. Como consecuencia del entendimiento con el Club de París, una vez que se completen determinados pasos técnicos, el Tesoro norteamericano dará la orden a sus representantes en organismos del giro en la posición, explicó el matutino que prosigue así:
Los puntos que cuestionaba el Gobierno de Obama sobre la política del Gobierno de Cristina de Kirchner eran tres: los incumplimientos de las sentencias del CIADI (tribunal del Banco Mundial), la manipulación de las estadísticas (y en ello la relación con el FMI) y por último la deuda con el Club de París. El monto adeudado a los Estados Unidos por Argentina y que estaba en default era insignficante en relación con cualquier variable, desde reservas a gasto público total: tan solo u$s 600 millones. Esto hacía más criticable el no pago argentino y alimentaba la reacción norteamericana ante los atrasos. Ayer desde Estados Unidos llegaban mensajes de apoyo al Gobierno por el cierre de las negociaciones. La intención del Gobierno argentino es que haya desembolsos del Banco Mundial, ya con el apoyo norteamericano en el directorio de ese organismo, en el segundo semestre. Cabe recordar que al momento de anunciarse el acuerdo con empresas que tenían sentencias a su favor en el CIADI en octubre pasado, el entonces ministro de Economía, Hernán Lorenzino, informó que el Banco Mundial iba a dar desembolsos al país por u$s 3.000 millones. Nunca llegaron y ni siquiera están por llegar. Fue más que nada marketing interno -dentro del propio Gobierno- del exministro que de poco le sirvió. El jefe de Gabinete Jorge Capitanich es quien ahora está gestionando la reactivación de estos desembolsos.
Luego recuerda el caso de los Fondos Buitre:
Quizás lo más relevante pase como señal a la Corte de los Estados Unidos. La misma fuente norteamericana recalcó también que muestra la Argentina que "hay voluntad de cumplir con los compromisos". El clímax de los fondos buitre se alcanzó con la definición de la Justicia de los EE.UU. al calificar al país como un "deudor recalcitrante". Los pasos dados con las empresas con juicios en el CIADI y lo cerrado ayer con el Club de París pueden ayudar a cambiar esa imagen ante el máximo tribunal y que, en definitiva, antes de decidir si toma o no el caso argentino, le pida opinión al "solicitor general" o representante del Gobierno federal ante la Justicia. "Ayuda pero es difícil anticipar decisiones", concluyó el diplomático de EE.UU.
Cabe recordar que tanto en el BID como en el BM, USA es el mayor accionista y venía desde hace varios años oponiéndose a la aprobación de créditos a la Argentina, que finalmente se autorizaban con el voto de otros países. Pero el rechazo del Gobierno de Barack Obama retrasa o dificulta la financiación.
El Gobierno intenta destrabar créditos con organismos por US$ 4.000 millones.

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