"Es más fácil que Alicia sea Presidente a que Cristina reforme la Constitución"

El gobernador Daniel Scioli no es una alternativa a la presidente Cristina Fernández. El rol de Scioli hoy día se asemeja mucho al de Eduardo Duhalde durante el 2do. mandato de Carlos Menem, de acuerdo a la diputada nacional Patricia Bullrich. Aquí, el resto de la entrevista:







por EDGAR MAINHARD
 
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Los pasos recientes de Cristina Fernández de Kirchner provocaninterrogantes. Todo indica que ella ha decidido precipitar el año político 2013. ¿Esa es su estrategia para que se hable menos de inflación, próximo desempleo y otros problemas, o solamente es una demostración de ansiedad? 
 
El contexto es un deterioro de la imagen positiva de la Presidente, y un aumento de su imagen negativa, pese a sus intentos de remontar su popularidad chauvinizando la política doméstica, entre Malvinas e YPF, supuestas reivindicaciones muy efectistas de soberanía nacional. Evidentemente, los resultados no han sido los esperados y, más allá de que el oficialismo declame su euforia, hay necesidad de reordenar, anticipadamente, la carrera por el 2015, algo que resultaría innecesario si Cristina fuese indiscutida.
 
Así se abrió el diálogo con la diputada nacional Patricia Bullrich (Unión por Todos-Ciudad de Buenos Aires). Durante las horas recientes se conoció bastante actividad de Bullrich en el temaAmado Boudou. Ella fue 1 de los 6 legisladores que ampliaron el pedido de juicio político a Boudou"por hechos nuevos (...) que pueden ser considerados nuevas causales de mal desempeño". (Los otros 5 fueron Federico Pinedo, Paula Bertol, Eduardo Amadeo, Omar De Marchi y Roberto Pradines). Precisamente por eso no hacía falta hablar sobre el vicepresidente de la Nación, acerca de quien, además, hay que lograr que se pronuncie el Poder Judicial más que el Legislativo, ya que el oficialismo cuenta con una mayoría suficiente en el Parlamento para imponer sus necesidades coyunturales.
 
En el oficialismo la detestan. Basta con apreciar la biografía de Bullrich alterada por kirchneristas en Wikipedia. Pero cuando el kirchnerismo ingresa a un ciclo menguante, esa situación hasta puede resultar alentadora...
 
En definitiva, el diálogo comenzó por Daniel Scioli, Gabriel Mariotto y el escenario político del oficialismo.
 
-La Presidente de la Nación vs. el gobernador de la provincia de Buenos Aires, ¿qué está pasando en el Frente para la Victoria?
 
-Es una situación de antipolítica, de parte de Cristina Fernández de Kirchner. Las decisiones de la Presidente de la Nación han provocado que Daniel Scioli goce de más espacio. En forma contraria a lo que parecía pretender, Cristina le ha agrandado la capacidad de movimiento político a Scioli, permitiéndole recibir adhesiones que no en el escenario anterior no se hubiesen manifestado. Si ella no hubiera alentado a Gabriel Mariotto y otros integrantes del cristinismo a atacar a Scioli, no se hubiera provocado una situación tan beneficiosa para Scioli, quien logró legitimarse como candidato ante sectores del peronismo que antes estaban expectantes. Algo similar ocurre con la embestida novedosa de Cristina contra el sindicalismo, que hasta ahora fue su aliado permanente. De hecho, no le hizo ninguna huelga general.
 
-¿Y por qué, entonces, Cristina Fernández reaccionó justo ahora en forma tan vehemente contra Scioli?
 
-Yo entiendo que han sido reacciones muy personales, que no entiendo y me resultan erradas, no relacionadas con el ejercicio de la política. En el caso de Scioli, supongo que habría que considerar la volátil historia de los Kirchner con el hoy gobernador, en especial la relación de Néstor Kirchner y Scioli. Pero en el caso de los sindicalistas es inexplicable desde el punto de vista de las alianzas que le brindaron fortaleza al Frente para la Victoria. Acerca de Scioli, ¿cuál es el problema que él manifieste su ambición presidencial, si todos sabemos que no lo será? Cristina fabricó un conflicto innecesario y en el que tiene mucho para perder. Te cuento que a mi me obliga a pensar en el año 1975, cuando Montoneros pasó a la clandestinidad: es autoexcluirse, autoincriminarse. Me parece que Cristina parte de una conclusión errada, que ella manifestó en aquella visita a Rosario, cuando la cámara de TV la sorprendió prometiendo "Vamos por todo". Ella creyó que el 54,11% de los sufragios que obtuvo en 2011 le concedía el poder absoluto pero eso no es cierto. Ese 54,11% fue el resultado de varios equilibrios internos, de los que participaron desde Scioli al sindicalismo. Ella realmente ha creído que no precisa de nadie más, y entonces se equivoca en forma grosera.

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