¿Poder Sindical? En la Argentina, no es posible

Las acusaciones van y vienen acerca de qué ocurrió en Avellaneda. En cualquier caso permite ubicar en contexto las apetencias de Hugo Moyano por el ingreso del Poder Sindical al control del Estado. Resulta evidente que resultaría en una Argentina inaceptable.

EDGAR MAINHARD | 20/10/2010 | 20:25


CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Desde que Rosendo García cayó acribillado (13/05/1966) en la ex confitería La Real, Avellaneda quedó vinculada a la violencia sindical.

El historiador Enrique Arrosagaray reconstruyó el enfrentamiento:

"A 6 ó 7 metros –en el mismo salón–, varios sindicalistas y políticos tomaban whisky y charlaban. Augusto Timoteo Vandor, Rosendo García, Petracca, Valdez, Saffi, el Beto Imbelloni, Gerardi, Armando Cabo, etcétera. La trifulca comenzó a los minutos por miradas desafiantes y porque a Horacito (N. de la R.: ¿Miguel Gomar?) lo apretaron en el baño unos hombres de Vandor. Los primeros puñetazos fueron entre Raimundo Villaflor y Rosendo García, y entre Rolando Villaflor y el Beto Imbelloni. Sonaron varios disparos desde la mesa de Vandor seguramente porque los invadió ese cóctel tan peligroso compuesto por el alcohol, el miedo y el odio. Un disparo partió la espalda de Rosendo García. Otros 2 se metieron en los cuerpos de Domingo Blajaquis y de Juan Zalazar –38 años, 5 hijos, vivía en Wilde, casado con Juana Fernández–. Otros balazos marcaron mesas, mármoles y columna. Una más terminó en un glúteo de Saffi. (...)".

Avellaneda regresó a las noticias de la violencia político-sindical el 26/06/2002, cuando Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, integrantes del Movimiento de Trabajadores Desempleados (MTD) Aníbal Verón, fueron asesinados por efectivos de la Policía Bonaerense en la estación Avellaneda del Ferrocarril Roca, hecho por el que fue juzgado y condenado el comisario inspector Alfredo Fanchiotti.

El senador en ejercicio de la Presidencia, Eduardo Duhalde, terminó anunciando su salida anticipada del Ejecutivo Nacional.

El miércoles 20/10, otra vez un muerto en una refriega en Avellaneda y, según dirigentes del Partido Obrero (PO), el caso se asemeja al de Kosteki y Santillán: "Es un muerto de la burocracia sindical, que también tiene Cristina Fernández de Kirchner sobre sus espaldas, como Eduardo Duhalde tuvo a Kosteki y Santillán", dijo Mariano Ferreyra, del PO, con TN.

Por eso el PO anunció una movilización, a la Plaza de Mayo. Y otra para el jueves 21/10.

Los incidentes se iniciaron cuando cesanteados del ferrocarril que hoy día es del Estado Nacional (despidió al ex concesionario El Metropolitano/Sergio Tasselli), acompañados por militantes de la Federación Universitaria (FUBA), del Partido Obrero (PO), del Movimiento Teresa Rodríguez y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), reclamaron su reincorporación.

Trabajadores del ferrocarril Roca, vinculados a la Unión Ferroviaria -siempre vinculada a José Pedraza- quisieron impedir el corte de las vías y comenzó una refriega a palazos y piedrazos, que se trasladó hacia la Ciudad de Buenos Aires.

Los incidentes se intensificaron en el cruce de la avenida Vélez Sarsfield y Luján, frente a la empresa de micros Chevalier; luego, una ambulancia particular (patente SVS 789) fue interceptada por miembros de las organizaciones sociales y 2 jóvenes y 1 mujer mayor fueron trasladados con heridas de bala al Hospital Argerich.

Al llegar al hospital se comprobó, según explicó el titular del SAME, Alberto Crescenti, que el joven Mariano Ferreyra, de 23 años, "estaba muerto" y que Elsa Rodríguez, de 60, llegó con "una herida de bala en la cabeza y desde las 14:30 se halla en el quirófano en estado desesperante".

El otro joven (Nelson Aguirre, de 30 años) tenía "heridas de bala en el miembro inferior derecho y uno de sus glúteos".

Hace tiempo que en las refriegas sindicales aparecen las armas de fuego. El 17/10/2006, durante el traslado del féretro de Juan Perón desde el porteño Cementerio de la Chacarita a la bonaerense Quinta de San Vicente, fue fotografiado y también detenido Emilio Quiroz, alias Madonna, chofer de Pablo Moyano, hijo mayor de Hugo Moyano, líder del Sindicato de Choferes de Camiones, cuando precisamente disparó una pistola, intentando matar a sus rivales de la Unión Obrera de la Construcción - filial La Plata.

No fue el último enfrentamiento reciente entre ambas organizaciones. El 24/08/2010, cuando Hugo Moyano asumió como titular del Consejo Provincial del PJ bonaerense, en la ciudad de La Plata, una notable cantidad de policías tuvieron que ubicarse entre los de Moyano y los de la UOCRA que responden a Juan Pablo Medina, alias 'Pata', para impedir un enfrentamiento.

Pero, además de esa rivalidad entre gremios de la Confederación General del Trabajo, existe otra entre sindicatos de la CGT y organizaciones sindicales de base que intentan obtener reconocimiento institucional. La mayoría de esas organizaciones son de partidos de izquierda, y la tensión permanente en la concesión de Subterráneos de Buenos Aires que explota Metrovías es un ejemplo de ello, con enfrentamientos reiterados.

La experiencia de Subterráneos -que provoca malestar en la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que es el sindicato 'homologado', porque se encuentra cediendo espacios a la novedosa Asociación Gremial de Trabajadores de Subte y Premetro- se ha intentado extender a otras actividades.

Por ejemplo, en el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, que enfrenta el crecimiento de los sindicatos de base en las empresas Kraft, Cadbury y Molinos Río de la Plata.

La Unión Obrera Metalúrgica enfrenta comisiones internas adveras en varios establecimientos como Bosch, la fábrica de vagones ferroviarios Emfer y la fábrica de autopiezas Dana.

En la UTA hay intentos entre choferes de ómnibus de larga distancia nucleados en la Unión de Conductores de la República Argentina (Ucra), reprimidos por gente de Roberto Fernández, secretario general del gremio 'homologado'.

El los trabajadores petroleros fue famosa la decisión del sindicato de Las Heras, Santa Cruz, de no reportar al jefe del gremio en la provincia, Héctor Segovia, alias 'Chaco'.

En la Asociación Bancaria, hoy día acéfala porque su líder, Juan José Zanola, sigue preso, las comisiones internas de los bancos Nación, Ciudad, Provincia y Central, reclaman espacio.

En la Unión Ferroviaria, a cargo de José Pedraza, hay opositores hace tiempo entre los delegados de la ex línea Sarmiento (TBA), capitaneados por Rubén Sobrero, alias 'Pollo', y entre los representantes del Belgrano Norte.

De paso, Pedraza participó de la movilización de Moyano en el estadio de River Plate pero el kirchnerismo, desesperado por quitarse de encima una muerte, comenzó a deslizar que Pedraza se había reunido antes con Eduardo Duhalde. Una tontería sólo posible para la mentalidad kirchnerista: utilizan un recorte del diario El Cronista Comercial del 16/09/2009, al que le quitaron la fecha para darla como actual.

Por ahora, el sindicato de camioneros, de Hugo Moyano, es de los pocos que en el sector del transporte no cuentan con delegados rebeldes.

En verdad, lo del Poder Sindical que reclama Moyano es mentira.

Por un lado, los sindicatos representan cada vez a menos trabajadores porque el empleo informal es el que crece en la Argentina, mal que les pese a los sindicalistas y a los funcionarios recaudadores de impuestos.

Por otra parte, avanzan los delegados de base no peronistas que tienen su propia agenda y no se reflejan en la CGT. Algunos reivindican a la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), pero también se encuentra en crisis. Y hay quienes trabajan directamente con partidos políticos de izquierda.

Luego, la ausencia de democracia en el sindicalismo argentino es tradicional. Son organizaciones en las que quien llega quiere permanecer para siempre, alimentado por el dinero de las obras sociales (subsidio que una dictadura -la Revolución Argentina- le concedió a los gremios peronistas, pero todos omiten recordarlo) y, a menudo, lo consigue apelando a conductas nada democráticas.

Por lo tanto, el Poder Sindical que reclama Moyano sería el triunfo del autoritarismo en una versión civil que, sin embargo, no es menos violento que la versión cívico-militar, tal como quedó demostrado en los años '70.

Quedan pendientes algunos fallos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre libertad sindical, y todo eso puede incrementar la violencia en breve.

Es interesante recordar que los Kirchner le prometieron en su momento a la CTA la homologación sindical que ya en el poder le negaron, para recostarse en la CGT de Hugo Moyano, con quien hoy día cogobiernan.

¿Qué significa la violencia que acaba de ocurrir? Que el modelo sindical que sostiene al kirchnerismo (y al peronismo, en general) 'hace agua'. La burocracia sindical se encuentra superada, pese al apoyo empresario que reciben. A su vez, los de la izquierda sindical tienen concepciones bastante inmaduras sobre el funcionamiento empresario.

Aquella votación que perdió Ricardo Alfonsín apenas comenzado su administración fue una tragedia para la sociedad argentina y sigue siendo una asignatura pendiente.

Que el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, asegure que “hay que buscar al responsable material e intelectual” y que es "una aberración", no ayuda mucho.

Fernández es un frívolo personaje que siempre intenta reaccionar con declaraciones fuertes para eludir la cuestión de fondo.

Fernández es uno de los responsables de la conducta social prevaleciente en estos tiempos, mediante la cual cualquiera puede utilizar la violencia por mano propia en forma impune, también es un tema a considerar. Ya no se trata de policías que no controlan las tribunas de los estadios de fútbol pese a cobrar un adicional por el servicio de seguridad que cumplen solamente en los accesos al evento (y por lo que no deberían cobrar porque son espacios públicos), sino de gente que dispara en la vía pública sin consecuencias.

Bienvenidos al kirchnerismo.

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