Medios K: investigan a un fotógrafo que lo compró un canal a Vila-Manzano

La Justicia allanó ayer las oficinas y la casa de Gustavo Matar, un fotógrafo y flamante empresario mendocino que en dos años y medio les facturó 30 millones de pesos al Municipio de San Rafael, a la Provincia de Mendoza y al Gobierno nacional. Su mayor crecimiento económico fue entre 2010 y 2012 la última etapa del gobierno de Celso Jaque (ahora embajador argentino en Colombia) y la campaña del actual gobernador kirchnerista Francisco "Paco" Pérez.

POR ROXANA BADALONI

La denuncia que llevó al juez a investigar al fotógrafo fue presentada en 2011 por diputados del radicalismo. Señalaron a Matar como uno de los principales proveedores de la comuna de San Rafael, en el sur mendocino, en servicios de "fotografía, videos y publicidad". Cuestionan también los sobreprecios de los trabajos que Matar hizo para el Gobierno mendocino. Compró un móvil de transmisión satelital que ha alquilado varias veces al Gobierno nacional para sus transmisiones desde Mendoza, como la Fiesta de la Vendimia. Pero la última adquisición, ha sido la compra del Canal 6 de San Rafael al grupo Vila-Manzano, en un procedimiento para adecuarse a la ley de medios. Esta operación aun no ha sido aprobada por la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), que dirige Martín Sabbatella.

Matar comenzó su carrera maratónica como fotógrafo del ex intendente del Frente para la Victoria, Omar Félix, quien ahora es diputado nacional y su hermano Emir, el actual intendente. Ahora el fotógrafo está enemistado con los hermanos Félix, debido a su estrecho vínculo con el ex secretario de la Gobernación de Mendoza, Alejandro Cazabán, quien está enfrentado con el oficialismo comunal en una interna para las legislativas de este año. La esposa del fotógrafo es la diputada provincial del Frente para la Victoria Evangelina Godoy, que responde políticamente a Cazabán.

La empresa del fotógrafo se llama Surtalent. Comenzó a contratar con el Estado en 2010. Según la denuncia de los diputados de la UCR, concentraba casi el 80% de lo que pagaba en ese entonces la Secretaría General de la Gobernación, a cargo de Cazabán, en concepto de publicidad. Otro planteo de la denuncia es por qué de una facturación de un millón de pesos se había saltado a más de 16 ó 17 millones en un año.

El fotógrafo Matar asegura tener facturado todos sus trabajos. "Es una chicana política que comenzó en medio de la campaña electoral", dijo a la prensa mendocina y cerró: "Yo hago arte y le pongo precio a lo que creo que vale mi trabajo".