Nuevo show bélico de Kim Jong Un

Corea del Norte ha anunciado este sábado 30/03 que las relaciones con Corea del Sur se encuentran en "estado de guerra", a causa del repunte de las tensiones entre ambos países y de las sanciones que le impuso el Consejo de Seguridad de la ONU... cuyo secretario general es surcoreano (Ban Ki Moon). "La perspectiva de las relaciones entre el Norte y el Sur se adentran en un estado de guerra. Todos los problemas a nivel de estado que surjan entre el Norte y el Sur serán abordados de esta forma", señala en un "comunicado especial" difundido por agencia estatal de noticias norcoreana KCNA.



CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Ya ha ocurrido en otras ocasiones y vuelve a suceder. Se ignora si por cuestiones de política doméstica; o de extorsión a Occidente a cambio de beneficios; o porque le conviene a China, su aliado-protector, lo cierto es que Corea del Norte ha decidido una vuelta más de tuerca en su agitación del escenario global, con USA y Corea del Sur como grandes enemigos formales.
 
El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, lanzó un "ultimátum" a Seúl y a Washington DC: ante "cualquier provocación, actuará de forma inmediata y sin previo aviso" a modo de "castigo sin piedad". 
 
Pyongyang amenazó a USA con emprender un ataque nuclear, "maniobras de invasión" que suponen un "paso extremadamente grave", según el comunicado norcoreano, luego de una reunión de emergencia entre Kim y su Estado Mayor. Corea del Norte activó un "plan de contención" contra la amenaza estadounidense con vistas a un posible "ataque preventivo".
 
Washington aseguró que 2 bombarderos B-2 volaron desde una base en Missouri y dejaron caer munición ficticia sobre una cadena de islas surcoreanas deshabitadas, antes de regresar a USA. Los B-2 han sido utilizados en maniobras militares en el pasado, incluido en 2000 en Corea del Sur, pero esta es la 1ra. vez que hacen un vuelo de ida y vuelta a la península coreana y arrojan bombas inertes, según el Pentágono.
 
El Ejército norcoreano se mantiene en alerta, contra objetivos en Corea del Sur, y bases militares estadounidenses en ese país y en las islas de Guam y Hawaii. 
 
El enojo de Corea del Norte fue consecuencia de la identificación de 2 bombarderos invisibles y de aviones B-52 de USA sobrevolando territorio surcoreano, en el marco de las maniobras militares conocidas como 'Foal Eagle'.    
 
Antes de esas operaciones, Corea del Norte alertó al Consejo de Seguridad de la ONU que la península de Corea se hallaba al borde de una "guerra nuclear", y Pyongyang canceló el acuerdo de tregua firmado con USA que puso fin a la Guerra de Corea (1950-1953) y suspendió el 'teléfono rojo' que comunicaba a los ejércitos de ambos lados de la frontera.
 
"Desde este momento, las relaciones entre Norte y Sur entrarán en estado de guerra y todos los temas que se planteen entre Norte y Sur se manejarán en consecuencia", informó el comunicado divulgado por la agencia de noticias KCNA.
 
"Las amenazas por parte de Corea del Norte hacia su vecino del sur dañan no solo la seguridad de la península coreana, sino también de todo el mundo", opinó el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle.
 
"Corea del Norte debe dejar de jugar con fuego. Estamos colaborando con nuestros socios para conseguir que Pyongyang acabe con sus amenazas y abandone su programa nuclear, que está violando las normas del derecho internacional. La situación en la península coreana afecta la arquitectura de la seguridad en todo el mundo", agregó Westerwelle.
 
Sus socios son USA y Corea del Sur.
 
La advertencia del Ejército norcoreano amenazó con interrumpir el tráfico de bienes y personas hacia el complejo industrial de la ciudad fronteriza de Kaesong, un proyecto gestionado por ambos países desde 2003, en el que un centenar de empresas surcoreanas emplean a unos 40.000 obreros norcoreanos y a otros 1.000 de nacionalidad surcoreana.
 
Kaesong es el principal centro de industria ligera de Corea del Norte. En 2003 se construyó la primera fase de un parque industrial destinado a empresas extranjeras, una iniciativa única en la política del régimen comunista.
 
De hecho, es la única ciudad de Corea del Norte donde se da cooperación económica entre las dos Coreas, algo que se acordó en la declaración conjunta del 15/06/2000.
 
Sin embargo, el complejo industrial de Kaesong, en Corea del Sur, continúa funcionando en la tarde del sábado 30/03, a pesar de la interrupción de la línea de comunicación militar: los permisos para que transiten las mercancías y los empleados surcoreanos crucen al Norte están siendo dados de forma verbal a través de intermediarios
 
La declaración no cambia gran cosa en sí, ya que los dos países se encuentran técnicamente en guerra porque el conflicto de Corea (1950-1953) finalizó con un alto el fuego que nunca se convirtió en tratado de paz definitivo. 
 
Pero el Ministerio de Unificación surcoreano ha respondido rápidamente al comunicado y dispuso el alerta de sus tropas.
 
Desde la Casa Blanca tampoco demoraron en reaccionar. "Hemos visto las informaciones sobre un nuevo comunicado no constructivo de Corea del Norte. Tomamos estas amenazas en serio y mantenemos las relaciones con nuestro aliado surcoreano", dijo la portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, Caitlin Hayden.
 
Los analistas consideran muy poco probable que estalle un conflicto amplio porque sería un suicidio para el régimen de Kim Jong-un, aunque sí podrían producirse escaramuzas. Piensan que el Norte está presionando para empujar a USA a la mesa negociadora, y así obtener ayuda y restablecer las relaciones, al tiempo que fomenta la lealtad del pueblo hacia el joven e inexperto Kim Jong-un.
 
Decenas de miles de personas participaron el viernes 29/03 en la plaza principal de Pyongyang en una manifestación de hora y media en apoyo del llamamiento a las armas. Buques de guerra norcoreanos, incluidas lanchas patrulleras, han llevado a cabo maniobras navales cerca de la frontera con Corea del Sur, según ha informado el Ministerio de Defensa en Seúl. 
 
China, lo más cercano a un aliado que tiene el Norte, repitió su pedido de calma. “Esperamos que las partes implicadas trabajen juntas para darle la vuelta a esta tensa situación”, dijo Hong Lei, portavoz de Exteriores. 
 
Rusia criticó, de forma implícita, el vuelo de los bombarderos estadounidenses. “Nos preocupa que al lado de la reacción adecuada y colectiva del Consejo de Seguridad de la ONU, se estén tomando acciones unilaterales alrededor de Corea del Norte que están incrementando la actividad militar”, dijo Sergei Lavrov, ministro de Exteriores. “La situación podría simplemente descontrolarse, está deslizándose hacia la espiral del círculo vicioso”.
 
Con el presidente Barack Obama volando hacia Florida para hablar de economía, la habitual rueda de prensa de la Casa Blanca la ofreció a bordo del Air Force One. El viceportavoz del presidente, Josh Earnest, dijo que las maniobras militares con Corea del Sur son "una prueba lo suficientemente clara para la comunidad internacional y los norcoreanos de que tenemos la capacidad y la voluntad de proteger nuestros intereses en la región”.
 
El secretario de Defensa, Chuck Hagel, dijo que Washington se estaba tomando muy en serio las amenazas de Pyongyang, y recordó que durante las maniobras en curso han participado también bombarderos B-52 con capacidad nuclear. Hagel negó que el despliegue de los B-2 en Corea del Sur fuera una provocación y aseguró que “la disuasión también forma parte de los ejercicios militares” entre las fuerzas surcoreanas y las tropas estadounidenses, maniobras que comenzaron el 1 de marzo y se prolongarán hasta el 30 de abril.

Comentarios

Entradas populares