A 48 horas de un parte médico decisivo, suba de tarifas, devaluación, desdoblamiento...

Mientras se especula con cambios en el Gabinete nacional cuando se produzca el regreso de Cristina Fernández (¿cuándo será eso? Faltan 48 horas para cumplirse 1 mes de ausencia de la gestión), varias consultoras privadas también aguardan que se tomen medidas económicas principalmente para enfrentar el problema del dólar con un Banco Central que sigue perdiendo reservas sin control, la balanza turística deficitaria y profundizándose especialmente cerca del período estival y el costo de los servicios públicos en alza. Sobre la devaluación, el Gobierno ya hace varias semanas que está dejando escapar la cotización, que podría llegar a $6,33 para fin de año. También se vuelve a hablar de desdoblamiento cambiario.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Este jueves 07/11 se conocería un nuevo parte médico sobre la salud de la presidente Cristina Fernández donde podría haber precisiones sobre su regreso al ejercicio del Poder Ejecutivo. Ocurre que al día siguiente, el viernes 08/11, se cumplirían los 30 días de reposo por prescripción médica a raíz del drenaje del hematoma intracraneal al que fue sometida el 08/10. La principal incógnita sobre el retorno de Cristina está en la conformación del Gabinete Nacional, alrededor del cual estos últimos días rondan varios rumores sobre modificaciones.

Pero también la realidad económica está demandando de decisiones para lo que resta del año. El problema del dólar se agrava y se acerca el período de mayor pérdida de divisas por el turismo. Como antecedente, los consumos con tarjeta en el exterior ya tocaron el récord de US$ 28 millones diarios este año según datos del Banco Central.

En tanto, las consultoras privadas empiezan a coincidir en lo que se viene; en principio unescenario de ajuste. Coinciden en augurar una suba de tarifas de los servicios públicos, un mayor ritmo de devaluación y un desdoblamiento cambiario para el turismo, según relevó el diario El Cronista este martes 05/11.

Al igual que el Gobierno, los economistas sostienen que el goteo de divisas por el turismo es uno de los principales problemas de la agenda económica inmediata y, quizás, el más fácil de solucionar, si se compara con los déficits de los sectores energético y autopartista.

Además, entienden que el Ejecutivo deberá avanzar de una vez por todas en una quita de subsidios a los servicios públicos. Eso ya se intentó pero Cristina desactivó las subas, especialmente en los ferrocarriles tras la Tragedia de Once y luego por la campaña electoral.

Luego, se espera que la devaluación del peso avanzará a un mayor ritmo.

Los consultores entienden que el Gobierno no cambiará el rumbo de la política económica, lo que lo llevará a hacer algunos ajustes en el tipo de cambio e intentar un progresivo quite de subsidios a las tarifas de electricidad, gas y transporte.

La primera consultora que puso en negro sobre blanco la hipótesis firme del desdoblamiento cambiario fue Econométrica, la firma de Mario Brodherson. En un informe que el economista radical firmó con Rodolfo Rodil, advirtió que, en 2014, “Se requerirá (...) proteger las reservas creando un mercado cambiario con una amplia variedad de tipos de cambio”.

Y prosiguió: “Se propondría un dólar oficial para las importaciones y exportaciones que se devaluará gradualmente por encima de la inflación, un dólar más alto para el turismo, un dólar más cercano al paralelo para estimular acuerdos con empresas que ingresen capitales del exterior. Además poner límites al uso de tarjetas de crédito en dólares así como crear un dólar especial para importaciones suntuarias, en particular autos”.

Sobre el esquema de tipos de cambio diferenciales, Finsoport, de Jorge Todesca, advirtió: “La Argentina ha vivido prolongadamente bajo un sistema de desdoblamiento cambiario durante el extenso lapso de 1934 a 1958 y en un par de períodos en las décadas de 1970 y 1980. Nada particularmente positivo emergió de esos períodos”.

Analytica, la consultora de Ricardo Delgado, también mencionó las distintas “alternativas” que contempla el Gobierno para reducir el déficit del sector turismo. Además del desdoblamiento y el cupo a los gastos en el exterior, esbozó “el pago de los consumos con tarjeta a la cotización de algún bono utilizado para las operaciones de “contado con liqui”.

Por último, Elypsis pronosticó, en un informe que data de octubre pasado, un “ajuste real de tarifas”. Este sería “gradual” y “provocaría menor gasto en subsidios y mejoría de las cuentas fiscales”. Los subsidios representan entre el 4 y el 5% del PBI, según distintas estimaciones. Para 2014, la consultora aventuró “mayor devaluación, (...) baja liquidez de los bancos y (...) política monetaria menos expansiva”, que provocará una suba de tasas.

En tanto, en lo concreto, el Banco Central (BCRA) aceleró la devaluación del peso en noviembre y, a este ritmo, ya anticipan en el mercado que el tipo de cambio podría alcanzar los $6,30 para fin de año.

"El ritmo de devaluación anualizado ya se acerca al 40%. Después de las elecciones se nota un cambio", dijo el responsable de cambios de un banco de primera línea consultado por el diario La Nación. El concepto está en línea con un informe difundido ayer del economista Nicolás Dujovne: "La última semana se observó una aceleración aún mayor: entre el 25 de octubre y el 1° de noviembre, el tipo de cambio se depreció 0,9% (+56% anualizado), al cerrar el último viernes en $/US$ 5,93".

Desde la consultora Econviews, que dirige Miguel Kiguel, también consideran que el tipo de cambio volvería a acelerar su tasa de depreciación "en vista de las sostenidas presiones sobre el mercado cambiario". La consultora es una de las que prevén que el dólar se ubicará a fin de año a $ 6,30, lo que arroja una tasa devaluación en 2013 de 28,1%.