Para que no se hable de Sergio & Hebe, se devolvieron los equipos secuestrados a USA

Un comunicado de la embajada estadounidense en la Argentina consideró superado el incidente en el cual la Policía Aeronáutica y la Dirección de Aduanas habían retenido equipos militares cuya devolución reclamaba el Gobierno de USA. Se supone, entonces, que ha sido devuelto el material pese a que el ladriprogresismo había dicho que era para realizar espionaje.




CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Desde hace 2 meses que el statu-quo con la diplomacia estadounidense se encontraba en vías de normalización pero ¿qué decidió a concretarlo ahora? Hebe de Bonafini y Sergio Schoklender: hay que borrar el tema de las noticias, si fuese posible.

Comunicado de la embajada estadounidense en la Argentina
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"Informamos complacidos, que el incidente que involucró la retención de materiales propiedad del Gobierno de los Estados Unidos de América, relacionado con una actividad de entrenamiento conjunta previamente planeada y aprobada, que por fallas administrativas involuntarias, debieron ser incautados, se ha resuelto satisfactoriamente.

Argentina y Estados Unidos comparten normas similares de aduana que ambos respetan.  Luego de una serie de reuniones que se mantuvieron con funcionarios de la Aduana y del Ministerio de Relaciones Exteriores, habiendo cumplimentado con todas las reglamentaciones de la aduana y de las leyes argentinas vigentes, el material mencionado fue devuelto.

Nos comprometemos a continuar trabajando juntos en una asociación basada en el interés y respeto mutuos, como así también con valores y responsabilidad compartidos."
 
Antecedentes
 
La historia comenzó el jueves 10/02/2011 cuando un avión C-17 Globemaster III de la US Air Force arribó al aeropuerto internacional de Ezeiza con material y personal destinado a una actividad conjunta con personal de seguridad y fuerza armada argentinas.
 
Los equipos se iban a utilizar para entrenar en el manejo de crisis y toma de rehenes al Grupo Especial de Operaciones Especiales de la Policía Federal (GEOF), con un presupuesto de US$ 2 millones que, como consecuencia del incidente, fue suspendido. Entre los materiales, se encontraron 1.000 m3 de cargamento que no había sido declarado.
 
El canciller Héctor Timerman participó del procedimiento en Ezeiza y el vocero oficioso de Cristina Fernández, Horacio Verbitsky, denunció en el diario paraestatal Página/12 que había elementos para sospechar que había una situación irregular, probablemente de espionaje.
 
La Aduana "procedió a liberar la carga ingresada legalmente" al país pero "incautó lo intentado ingresar en contravención a las leyes", informó Cancillería, y anunció que Argentina "formulará una protesta así como un pedido para la colaboración en la investigación sobre los motivos que la Fuerza Aérea de los Estados Unidos tuvo al intentar violar las leyes argentinas ingresando material camuflado dentro de un cargamento oficial".
 
El texto afirmó que entre el material retenido "hay desde armas hasta diferentes drogas, entre otras, varias dosis de morfina" y que el avión también "había intentado ingresar al país material para interceptar comunicaciones, varios GPS de una sofisticación reveladora de su potencia, elementos tecnológicos conteniendo códigos caratulados como secretos, así como un baúl completo con drogas medicinales vencidas".
 
El gobierno de USA reclamó que la Argentina devuelva "inmediatamente" todos los ítems retenidos porque "son materiales que normalmente se llevan para los cursos de entrenamiento", segun un vocero del Departamento de Estado, y agregó que todo "había sido coordinado y autorizado por la Cancillería argentina y el ministerio de Seguridad". 
 
"El entrenamiento fue cancelado y el avión con el equipo de entrenadores se fue de la Argentina", informó el vocero. "Tampoco entendemos por qué, si había alguna duda, no se la manejó por los canales diplomáticos habituales en vez de hacerlo de esta forma", agregó.
 
El Departamento de Estado convocó al embajador argentino en Washington, Alfredo Chiarada, para"transmitirle nuestra sorpresa y nuestra preocupación con respecto a lo sucedido".
 
La gran pregunta es: ¿fue una maniobra de distracción del gobierno de Cristina Fernández? Todo parece indicar que sí.

Lo más sugestivo es que ahora se los devuelve como otra maniobra de distracción del Madregate, dicen algunos.

Otros afirman que es un intento de impedir novedades judiciales desde Miami, Florida, USA, acerca de movimientos financieros de Sergio Schoklender.

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