Cristina y su Eje del Mal: Justicia, empresarios y, en especial, las automotrices

La Presidente de la Nación cumplió con el mandato constitucional que establece que el 01/03 de cada año debe inaugurar el período de sesiones ordinarias, que concluirá el 30/11. Ella insistió en negar el ajuste en marcha: "La economía volvió a crecer y estamos en el proceso más virtuoso de los últimos 200 años". A continuación leyó un informe del Banco Mundial elogioso con respecto a la Argentina. Ella habló de un supuesto “proceso de reindustrialización del país” (apertura de más de 170 parques industriales y miles de fábricas), “que han generado valor agregado y que también nos generan cuellos de botella por las importaciones que tenemos que hacer de aquellos productos que no hacemos”: esa fue la explicación del cepo cambiario vigente. Ridículo por donde se lo evalúe. Cristina insistió en la creación de más de 6 millones de puestos de trabajo, resaltó el papel de los sindicatos y destacó el crecimiento en la cantidad de afiliados que registraron los gremios, aunque no dijo algo sobre la deuda del Estado con las obras sociales, que desespera a los sindicalistas. Según Cristina, el sindicalismo, es "uno de los pilares fundamentales que ha permitido generar una clase trabajadora que lucha por su derecho, que tiene memoria colectiva y que no permite retrocesos". Se quejó de las “más de 80 corridas bancarias”, que “comenzaron conmigo”. También identificó a 3 enemigos.

La Jefa de Estado consideró que "salvo honrosas excepciones, no encontrás un fiscal o un juez, a las 3 de la mañana". Foto NA

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El período legislativo 2014 marca que en la Cámara de Diputados, el oficialismo contará con 119 diputados propios y 13 de fuerzas aliadas, con lo cual totalizan 132 miembros. 

 

En el Senado cuenta con 35 bancas propias y sumaría 4 aliados de bloques provinciales, lo que hace un total de 39 escaños, 2 más de las 37 que se necesitan para tener quorum propio.     

 

Cristina confía en esas fuerzas para obtener lo que será su legado: las reformas de códigos judiciales que se sumarán a la reforma que ya ha conseguido de códigos judiciales.

 

Sin embargo, no será tan fácil en esta ocasión.

 

Tal como ella acostumbra hacer, Cristina defendió a libro cerrado su gestión. 

 

Por ejemplo, cuando comienzan a observarse problemas con la demanda de mano de obra, ella dijo que en el último trimestre fue el 37mo. consecutivo con reducción del desempleo, cuyo índice cayó a 6,4%, "el índice más bajo que tengamos memoria", manifestó.

 

Conociendo que el éxito de lo que resta de su gestión depende de que el conflicto social no explote, ella buscó acariciar el ego de los sindicalistas, aunque ellos hubieran preferido que la Presidente de la Nación explicara si les pagará algo o toda la deuda del Estado con las obras sociales, y cuándo ocurriría.

 

Cristina destacó el retorno de las negociaciones colectivas de trabajo en condiciones libres entre patronales y sindicatos (no es un mérito de su gestión sino que comenzó mucho antes), el funcionamiento del Consejo Salario Mínimo Vital y Móvil, y el haber logrado que éste sea el más importante de América Latina en términos nominales y de paridad de poder adquisitivo, como así también el crecimiento de afiliados a sindicatos. 

 

También señaló que entre los sindicatos que más crecieron está el de los docentes, merced al incremento de la cantidad de alumnos producto de la Asignación Universal por Hijo.

 

Asimismo, destacó la "enorme inyección que se ha dado al mercado con el Plan Procrear, uno de los grandes motores en materia de crecimiento. El año pasado se batió record en materia de bolsa de cemento individual, característica de la obra pequeña, individual", señaló, renovando su vínculo con la actividad de la construcción.

 

Los 3 enemigos

 

En el discurso de Cristina pudieron identificarse 3 adversarios.

 

> Los empresarios, en general, a quienes pretende culpar por la inflación pero, en verdad, les guarda rencor porque no la acompañan con la inversión directa ni el regreso de moneda extranjera en el exterior.

 

Ella le pidió "a los empresarios que valoren el esfuerzo que hemos hecho", sostuvo que "no hay ningún justificativo para aumentos de valores que no se condicen con la realidad y que saquean el bolsillo de los argentinos", y aseguró que "vamos a tener que abocarnos desde el Ejecutivo y desde el Legislativo a sancionar instrumentos que defiendan a los usuarios consumidores frente a los sectores concentrados monopólicos y oligopólicos". 

 

"Si alguien que vende alimentos o bebidas, alguien que tenía dos o tres supermercados, o exportaba muy poco, hoy han ganado mucho dinero y está bien, por qué no ponerle el hombro al país, para continuar con este modelo de crecimiento", agregó Cristina.

 

En el final de su discurso, volvió a referirse a los empresarios.

 

Según ella, pidió apoyo a "aquellos que han intentado en estos años torcer el rumbo, inexplicablemente. Van a ser fuertes como empresarios en la medida en que el país sea fuerte",expresó. (¿?)

 

> Dentro de la comunidad empresaria, a la industria automotriz, que en el pasado había sido su sector preferido pero ahora les culpa por no sustituir importaciones tal como ella lo deseaba. En verdad, eso revela una profunda ignorancia de la Presidenta de la Nación acerca de cómo es el proceso de fabricación de automotores en el siglo 21. El desconocimiento incluye a la ministra Débora Giorgi (¿fue inteligente alguna vez o ya era tan desconocedora de todo cuando trabajaba para Javier González Fraga?) y a su ministro de Economía, Axel Kicillof, obviamente.

 

Cristina Fernández señaló que "se dice que ha caído la venta de automóviles por este impuesto a los autos importados. Los números que nosotros tenemos no son estos".

 

Luego ella afirmó que "de los producidos localmente solo el 4% pagaría el impuesto. El principal problema que está afectando a la industria automotriz es la caída de las exportaciones, sobre todo de Brasil".

 

Por ello, Cristina indicó que se convocará a los empresarios automotrices para discutir la estructura de costos, pero reclamó que se terminen los titulares "que dicen que por los impuestos internos se cayó la venta de autos. Se cayó el mundo, y por eso es necesario sostener el mercado interno, para seguir sosteniendo el trabajo y el ingreso de esos empresarios".

 

Y resaltó que "algunos autos aumentaron 45%, por encima de la devaluación. El trabajo no lo pagás en dólares y la energía la tenés subsidiada".

 

Luego, Cristina señaló que según un informe de CEPAL (organismo de relativamente bajo nivel técnico, patrocinado por Naciones Unidas), la Argentina "es el único país que no ha reprimarizado sus exportaciones, y que ha presentado un importante aumento de las manufacturas industriales en la participación total de la torta de exportaciones".

 

En ese marco, destacó el incremento de ventas de automóviles, de consumo de alimentos y bebidas, el otorgamiento de financiamiento blando a través del diversos planes de bancos nacionales; también el crecimiento las industrias de medicamentos, software, y otras.

 

Entre los desafíos afrontar, cuando el Mercosur nunca anduvo peor, culpa de los Kirchner, ella señaló la necesidad de apostar a alianzas estratégicas regionales para obtener contratos de fabricación de manufacturas de alto valor agregado. "Tenemos la investigación, el desarrollo, la tecnología, la voluntad, el financiamiento y las políticas públicas para poder hacerlo", aseveró. (¿?)

 

> Cristina también confirmó al Poder Judicial como un adversario. El enfrentamiento no comenzó con la llamada Ley de Medios sino bastante antes, pero desde el tema Clarín, se profundizó. Lo interesante es que hoy día, gracias quizá al empresario mexicano David Martínez, Grupo Clarín ya no es un objetivo de la Presidente, pero sí lo es la Justicia argentina.

 

Cristina sostuvo que el Parlamento tendrá un papel importante en la sanción de varias normas durante este año. Entre ellas, destacó que "el Senado ya lo aprobó, está en Diputados el nuevo Código Civil y Comercial". Asimismo, resaltó que le fue entregado por parte de una comisión "un anteproyecto de Código Penal, que lo está mirando el Ministerio de Justicia", y será enviado al Parlamento a la brevedad.

 

También informó que el Gobierno está elaborando un proyecto de nuevo Código Contencioso Administrativo, ya que opinó que "no se puede trabajar con el mismo código que legisla sobre las relaciones entre ciudadanos, el rol del Estado, que es completamente distinto al del siglo XIX".

 

Ella reivindicó su frustrada reforma del Consejo de la Magistratura, una de cuyas partes fue dictada inconstitucional por la Corte Suprema. Con 2 ministros de la Corte Suprema presentes (Ricardo Lorenzetti y Highton de Nolasco), ella firmó: "Sigo creyendo que era un excelente proyecto: no puede ser que todos los poderes seamos controlados, y haya un poder al que nadie controle".

 

Más aún: Cristina, abogada de profesión, aseguró que "un juez no puede ser opositor, tampoco oficialista. Un poquito de control popular no lo viene mal a nadie. No pudo ser, alguna vez será". Y pidió"a los miembros del Consejo de la Magistratura, que pongan lo mejor de sí, para que funcione: en designación de jueces, de fiscales; y también en que los jueces que no funcionan no tengan esas actitudes. No se puede tener actitudes corporativas".

 

La viuda de Néstor Kirchner aseguró que los jueces "tienen muy bueno presupuesto, ganan los mejores sueldos, siguen sin pagar Ganancias", y resaltó que por ello "necesitamos una mejor Justicia".

 

La Jefa de Estado consideró que "salvo honrosas excepciones, no encontrás un fiscal o un juez, a las 3 de la mañana". 

 

También indicó que en una conversación con el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri (curioso gesto conciliatorio hacia el líder del PRO, probablemente intentando atraerlo a su causa de crítica al Poder Judicial), coincidieron que en la toma de Villa Lugano "si el fiscal hubiera estado en el momento indicado, había 10 o 12 personas. Hubiera sido posible el desalojo, sin ningún desastre". 

 

"Necesitamos una justicia ágil, que cuando la llame el poder político, venga y disponga y haga lo que tenga que hacer", aseguró.