A dos años del 22F, Cristina y Randazzo presentaron coches del Sarmiento

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, presentaron los 72 coches 0km adquiridos a China, que serán destinados a la Línea Sarmiento. El anuncio, retrasado en varias oportunidades, coincide con el cumplimiento de los dos años y tres meses de la tragedia ferroviaria quedejó un saldo de 51 muertos y más de 700 heridos.

"Quiero ser sincera, yo no viajo en tren, Florencio (Randazzo) no viaja en tren, porque en tren viaja el pueblo". Con esa frase, la Presidenta inició su breve discurso de inauguración de los nueve trenes -integrados por 72 vagones- que sumarán a la línea en los próximos 60 días, luego de recorrer las unidades junto al ministro y precandidato a presidente por el Frente Para la Victoria.

Luego de recorrer las unidades, Cristina elogió la "tecnología en seguridad" de los nuevos coches y le envió un fuerte discurso a los trabajadores del Sarmiento: "Esto es de los usuarios, no es de ustedes. Contribuyan con sus compañeros trabajadores que usan el servicio". "Muchos de ellos ni siquiera tienen un trabajo formal, ustedes sí y con un muy buen salario", apuntó.

Cómo son. La jefa de Estado destacó que los nuevos trenes "son muy modernos". "No son diesel, son eléctricos. La renovación de todo el recorrido, toda la vía férrea también es muy importante", describió. Al momento de informar que durante el mes de junio la línea funcionará con nueve trenes nuevos y mejorará la frecuencia del servicio, la Presidenta dijo: "Estamosduplicando la cantidad de coches viejos por coches nuevos y con mejores condiciones". 

"Le pido a los usuarios que los cuiden", siguió. "Yo no viajo en tren, pero millones de personas sí. Tienen que cuidarlos", reiteró la mandataria, que no ahorró advertencias a los trabajadores ferroviarios. "Yo sé que ustedes se levantan todos los días a trabajar, se levantan temprano, se merecían un lugar como este", lanzó.

La Presidenta le dedicó un párrafo aparte a defender la cuestionada política subsidiaria. "Los subsidios son parte del salario indirecto porque si nosotros no los mantuviéramos, el boleto aumentaría a cinco o seis pesos y los trabajadores le pedirían a sus empleadores que aumenten el salario para poder transportarse", explicó. "Les meten tantas cosas en la cabeza que muchos repiten cosas que van contra sus intereses, los que viajan acá son trabajadores", concluyó.