Preocupación K por que Lanata y Twitter aborten la destitución de Campagnoli

Adolfo Villate, hombre del Movimiento Evita que oficia de acusador en el juicio contra el fiscal que investigó a Lázaro Báez, vinculó el pico de presión que sufrió una de las integrantes del jury, y que obligó a la suspensión de los alegatos, con las "presiones" de los medios y de las redes sociales. La jueza Martínez Córdoba, quien pidió licencia, podría votar en contra de la destitución de Campagnoli.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). La audiencia en la que se desarrollaba el juicio al fiscal José María Campagnoli fue suspendida este martes y pospuesta hasta el próximo 30/06 porque una de las integrantes del jury solicitó una licencia al sufrir un pico de presión. 

 

Se trata de María Martínez Córdoba, quien tendría el voto que podría salvar al fiscal que investigó en profundidad a Lázaro Báez, un empresario muy cercano a la familia presidencial. 

 

En las últimas horas comenzaron a circular en las redes sociales las versiones sobre una presunta presión del Gobierno Nacional sobre Córdoba para que se incline por la destitución de Campagnoli.

 

Al mismo tiempo, el ala cristinista del jury evidenció su preocupación por si la licencia de la jueza pueda torcer lo que parecía el destino final del fiscal: la expulsión. 

 

A través de declaraciones a la agencia Télam, el fiscal general del jury, Adolfo Villate, se manifestó sorprendido por la postergación de los alegatos dispuestos para este martes por parte del Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público Fiscal y la relacionó con las “presiones” que recibe de los medios.

 

Villate, hombre cercano a la procuradora Alejandra Gils Carbó y militante del Movimiento Evita(que adhiere al cristinismo) culpó a la "presión" de los medios y de las redes sociales por la situación de Martínez Córdoba. 

 

Villate aseguró que “este problema de salud que tuvo la jueza Martínez Córdoba es motivado por la gran presión de los medios y las redes sociales” y detalló que “a través de tweets se difunden los teléfonos de su casa”, de esta manera “se la insta a que vote de tal o cual manera”.

 

Por otro lado, el fiscal general se refirió en declaraciones a Télam a las “presiones públicas” que han tenido y mencionó como ejemplo el programa Periodismo para Todos que conduce Jorge Lanata emitido el domingo pasado.

 

También destacó los “tweets amenazantes” que reciben a través de las redes sociales.

 

Consultado sobre si es frecuente que tras un problema de salud de uno de los jurados se interrumpa el proceso de juzgamiento, Villate marcó que hablar de normalidad es difícil, ya que “hubo  muy pocos enjuiciamientos” y subrayó que “solo hubo seis en 20 años”.

 

Villate remarcó que “si los tiempos fueran los mismos -aunque todavía no fueron notificados- el lunes próximo se leerían los alegatos y el martes se daría el veredicto”.

 

También se postergó la "incorporación por lectura" de los testimonios de las jueces de instrucción María Gabriela Lanz y Wilma López y del fiscal federal Guillermo Marijuan, que se iba a realizar hoy previo a los alegatos.

 

A Campagnoli, suspendido en sus funciones, se le atribuye haber cambiado el objeto procesal de una causa en la que el financista Federico Elaskar pasó de denunciado por administración fraudulenta a supuesta víctima de una extorsión.

 

Campagnoli, según los fiscales Marcelo García Berro y Adolfo Villate, habría retenido esa causa, cuando, por razones de competencia, correspondía que fuera investigada por Marijuan.

 

Otros cargos contra Campagnoli son un "abuso de autoridad" en la fiscalía de Saavedra y asumir una actitud "desafiante" contra Gils Carbó, cuando se le quitó una subrogancia en otra repartición del ministerio público fiscal.

 

La defensa de Campagnoli, a cargo de los abogados Ricardo Gil Lavedra e Ignacio Irigaray, argumenta, en cambio, que el suspendido fiscal fue sometido a un jury por investigar al empresario Lázaro Báez.