El Brasil de Neymar no es una maravilla: Agónico triunfo por penales

El último penal de Chile lo pateó Jara y la pelota pegó en el poste. Así ganó Brasil, con un Neymar Jr. inexistente, uno de los varios éxitos que tuvo el planteo táctico de Jorge Sampaoli. Chile lo tuvo sobre el final del alarque, cuando Pinilla estrelló la pelota en el travesaño del arquero Julio César. Brasil clasificado pero confirmando todas las dudas que provoca el equipo de Luiz Felipe Scolari. Notable lo de Chile porque jugó contra el equipo local, gran favorito, y no se rindió, por momentos fue muy superior aunque no pudo concretarlo en la red rival. Y el fútbol es así: en esta ronda del Mundial, si nadie lo define en 120 minutos, hay penales.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Brasil es pentacampeón del mundo. Anfitrión en la versión 2014, donde se autodeclaró candidato a lograr 6 copas FIFA, según lo confesó su presidenta, Dilma Rousseff, que encara la posibilidad de su reelección en octubre.

En cambio Chile no es un especialista en mundiales, aún cuando su crecimiento ha sido muy veloz, en parte por la coherencia y permanencia en el trabajo de su equipo seleccionado. Primero Marcelo Bielsa, que lo llevó a Sudáfrica 2010; ahora Jorge Sampaoli, ambos argentinos (en el medio anduvo otro DT, Claudio Borghi, también argentino). Si el equipo persiste en esta propuesta dará que hablar en el futuro. En 2014 se consolidó como una potencia emergente en el universo futbolero.

Brasil deja enormes dudas acerca de sus posibilidades de cumplir el objetivo enunciado por Rousseff. Si Neymar Jr. no aparece, Brasil desaparece porque carece de propuesta colectiva, y todo depende de la individualidad del N°10.

No es el Brasil de otrora, donde el "jogo bonito" tenía múltiples talentos, varias propuestas para desequilibrar, y un anhelo de protagonismo permanente. Eso quedó en el pasado.

Brasil no pudo desnivelar durante 120 minutos jugando como local, con sus jugadores pidiendo a los simpatizantes que se hicieran escuchar como si eso amedrentara a los chilenos. O como si los brasileros quisieran jugar con uno más (el N°12) porque en el campo de juego no se sentian superiores.

Chile dominó ampliamente en muchos momentos del partido aunque no pudo rematarlo, y quedó menguado físicamente: Vidal y Medel tuvieron que abandonar el campo de juego en forma prematura.

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El gran héroe de Brasil fue su arquero Julio César, porque atajó 2 penales, en el final, cuando el partido había que definirlo desde la ejecución directa a 11 metros del arco, esa invención de 1880 del arquero y empresario William McCrum irlandés, que luego incorporó el fútbol global.

Así Brasil se clasificó para los cuartos de final del Mundial 2014 al superar a Chile en la tanda de penales (3-2) tras haber empatado 1-1 en los 90 minutos reglamentarios y en la prórroga.

Salvo en los 20' iniciales, cuando Brasil hizo valer su ritmo, al combinado brasileño le atenazó el miedo y le faltaron recursos para doblegar al admirable equipo de Sampaoli.

Quizá mereció Brasil llevarse un mejor resultado en el 1er. tiempo, pero fue totalmente superado por Chile en el 2d. tiempo.

Muy atrás Chile, hasta el gol. Respetando en exceso al dueño de casa, incapaz de salir a aprovechar las ventajas defensivas que ofrece Brasil.

El gol llegó en uno de los aspectos en los que Brasil es muy superior al cuadro chileno: el juego aéreo. Neymar centró desde el córner, Thiago Silva prolongó y Jara, en su intento por evitar que David Luiz rematara, metió el balón en su portería.

Al rescate chileno acudió Hulk. El futbolista del ruso Zenit devolvió mal a Marcelo un saque de banda, Vargas anduvo rapidísimo y habilitó a Alexis Sánchez, que no se alteró dentro del área. Controló, miró y, pese a tener a Thiago Silva delante, colocó la pelota junto a un poste, cruzada.

Entonces Brasil intentó irse al vestuario ganando: Silva evitó el gol tras un cabezazo de Neymar. Y una gran acción de Neymar la finalizó Fred con un remate alto casi en el área pequeña. Poco después, Alves obligó a Bravo a volar.

Pero Chile tuvo su oportunidad en un remate de Aranguiz, que pintaba a gol, y salvó David Luiz tirándose al suelo.

Pero la 2da. mitad de los brasileños fue decepcionante, quizá atenazados por el miedo a la descalificación.

Se vio a un Brasil fundido, sin recursos, a merced de Chile.

Aranguiz tuvo en sus pies la eliminación del anfitrión tras una jugada maravillosa. Isla y Vidal tiraron una pared (la devolución del de la Juve fue preciosa) y el pase atrás lo remató Aranguiz. Julio Cesar evitó el gol en una atajada con reflejos notables para rechazar el balón, y respiró el Mineirao.

Bravo tuvo que hacer un paradón ante Hulk. Fortísimo derechazo y respuesta impresionante del arquero chileno.

Impresionó ver a Brasil metido en su campo los últimos minutos, esperando el final del partido achicando balones.

En la prórroga estuvo algo más cerca de la victoria Brasil, salvo en el último minuto.

El admirable cuadro de Sampaoli se refugió atrás, aunque nunca fue pasado por encima.

Por si acaso, apareció Bravo, que rechazó un misil de Hulk desde fuera del área.

Cuando el partido agonizaba, Alexis y Pinilla combinaron y el 9 soltó un latigazo que hizo vibrar el travesaño y enmudeció al estadio entero. Brasil estaba a un centímetro del abismo.

Llegaron los penales.

Convirtió David Luiz, falló Pinilla, tiró el balón fuera Willian, paró Julio César a Alexis, marcó Marcelo, marcó Aranguiz (¡muy bien pateado!), paró Bravo a Hulk y marcó Marcelo Díaz. Todo quedó para el 5to. Neymar engañó a Bravo.

Final para Jara: lanzó tan ajustado que el balón pegó en el palo y la pelota salió hacia adentro pero no traspasó la línea. Sólo entonces, tras más de dos horas de sufrimiento, respiró Brasil.